Calla el ave
duerme su quieto sueño
en su nido gris.
Fluye el agua
entre dispares rocas
frío manantial.
Las blancas nubes
disgregan henchidas
figuras níveas.
Volaron raudos
hacia cálidas tierras
batiendo alas.
Sutilezas
Tejido enmarañado, resistente, muchas veces obtuso. Arropa o desnuda nuestra existencia, tiempo, distancia. Trama sutil que nos une a través de los días de nuestra vida a lo ignoto. Más allá de lo previsto, de aquello que en nosotros alumbre o no alumbre, nos abarque desde siempre. No sé hacia dónde nos conduce, no sé qué nos espera, qué hay más allá de la añoranza. De esta manera ancestral de querer esperar lo probable, lo improbable. A pesar del desgarro, de la nada que nos asola y a la vez intenta acercarnos a la esperanza, contra todo riesgo, soslayando el cansancio. Allí, en ese ámbito que se abre luminoso, allí es donde se tejen las hebras de la constancia, de la perseverancia, del bien previsto.
En este caso la ilustración de Petra Quillfeldt muestra un martin pescador mediano (Chloroceryle amazona), que viéramos en un rio en Córdoba, por primera vez, allá por marzo de 1998.
ResponderBorrarPueden leer mas detalles en https://es.wikipedia.org/wiki/Chloroceryle_amazona
(es posible que tengan que copiar el enlace y pegarlo en su navegador)
Gracias por los datos Juan... los tenemos en cuenta... Nelly
ResponderBorrar